La Ilustración y su recepción en la cultura postmoderna
La Ilustración.
1.
Generalidades.
1.1. ¿Qué es la Ilustración?
Es una época histórica y un movimiento
cultural que se desarrolló en toda Europa especialmente en Francia, Inglaterra
y Alemania; éste se desarrolló desde finales del siglo XVII-XVIII hasta la Revolución
francesa e incluso hay quienes lo extienden hasta los primeros años del siglo
XIX.
1.2. ¿A qué debe su nombre?
Este periodo se llamó Ilustración,
Iluminismo o siglo de las Luces porque los movimientos culturales e
intelectuales que se gestaron por esta época tuvieron como finalidad la
disipación de las tinieblas y las oscuridades de la humanidad mediante las
luces de la razón.
1.3 ¿Cuál era la idea más clara de los Ilustrados?
Los Ilustrados o Iluministas creían que la
razón humana, su luz, su ejercicio y su uso podían combatir la ignorancia, la
superstición, la tiranía y de ese modo construir un mundo mejor; esta es la
razón por la cual la Ilustración no fue solo un movimiento academicista, sino
que tuvo su influencia en el campo de la economía, la política y la sociedad en
general. La intención más clara de todos los pensadores ilustrados era la de llegar
a todas las capas sociales y a todos los estratos sociales.
1.4. ¿Cuáles fueron los límites
de la Ilustración?
La Ilustración fue un movimiento revolucionario
que lo agotó, discutió y analizó todo: las ciencias de la naturaleza, la Divina
Revelación, la metafísica, el gusto, el placer, la música, la moral, la Escolástica,
los derechos de los príncipes. En este sentido se puede decir que la
Ilustración consistió en una forma de pensamiento y en una forma de valoración
que fue capaz de superar los estamentos academicistas.
1.5. ¿Cuáles fueron las
principales tendencias de la Ilustración?
Primero que todo la Ilustración fue un
movimiento que tuvo su origen en la época del Renacimiento y que extiende sus
ramas hasta el Racionalismo y el Empirismo, siendo sus principales exponentes:
Descartes, Locke, Hume, Berkeley, Bacon, Galileo, Boyle, Grotius, Hobbes,
Leibniz, Newton, Spinoza. Además, la Ilustración sirve de base para las
revoluciones francesa e industrial y sirve de ayuda para establecer la clase
burguesa de los siglos XVII-XVIII.
1.6. ¿Dónde su ubica
geográficamente el movimiento de la Ilustración?
La Ilustración se inicia en Gran Bretaña,
luego se traslada y se asienta en Francia produciendo movimientos como el
Enciclopedismo y el Racionalismo; después se convirtió en una nueva forma de
pensamiento que se propagó, además, por los países bajos, la península ibérica,
la Itálica, Alemania, Rusia, Polonia, Suecia. Etc.
2. Contexto histórico donde su
ubica el movimiento.
2.1. Siglo XVII. Siglo de las
luces o época de la razón.
Según algunos historiadores, el siglo XVII
puede ser denominado la era o la época de la razón y es ahí donde temporalmente
se ubica la Ilustración; esta es la razón por la cual la Ilustración suele
llamarse época de la razón.
El siglo XVI y comienzos del XVII estuvo
marcado por guerras entre religiones; hacia 1648 se firma el tratado o acuerdo
de Westfalia que fue un acuerdo entre
católicos y protestantes para poner fin a la guerra religiosa y fin a la guerra
civil en Inglaterra.
Para estas épocas las fuentes del
conocimiento coincidían con las mismas que eran importantes para el Medioevo:
la divina Revelación, la mística, la fe y la teología. Frente a esto, el silgo
de las Luces o época de la razón trata de establecer que las fuentes
principales del conocimiento debían estar centradas en los axiomas
lógico-matemáticos; por esta razón la matemática se convirtió en el tipo de
conocimiento que establecía ciertos rasgos de objetividad y absolutidad, los
que proporcionaban estabilidad, duración y continuidad frente a un mundo que
empezaba a volverse movedizo, inseguro y cambiante.
2.2. Siglo XVIII. Siglo de las
revoluciones.
La Ilustración estaba influenciada en
muchos aspectos por Blas Pascal, Leibniz, Galileo Galilei; todos estos
pensadores habían influido de tal manera en el pensamiento europeo que se
inicia una gran revolución en el mundo de las ideas y de la cultura.
Sin embargo, es Newton quien combina los
axiomas matemáticos y lógicos con la observación, también Galileo y Kepler. A
partir de sus descubrimientos y sus aportes, la experimentación ha de ser quien
dice o declara lo que se debe observar y lo que debe quedar consignado en el
lenguaje y en el mundo de las hipótesis o teorías científicas; desde esta
perspectiva el mundo de la fe, de los mitos, de las creencias y de las
costumbres empieza a quedar rezagado a un segundo plano.
Esto no excluyó el hecho de que la búsqueda
de la mente de Dios permaneciera en el olvido, algunos pensadores consideraban
que la mente de Dios, su plan creador y las leyes que reflejan los fenómenos
cosmológicos se deben deducir e inferir de un estudio racional de la creación y
de la naturaleza.
2.3. La Ilustración y la fe.
Respecto al problema de la relación entre
la fe y la razón, para la época Ilustrada existían dos grandes tendencias
contrapuestas.
La primera estaba formada por aquellos
pensadores que trataban de demostrar la existencia de Dios a partir de
argumentos racionales; estos lo hacían basados en dos soportes: la fe y la
piedad; ellos acudían a la ley natural para, desde ahí, demostrar la existencia
del ser supremo.
La segunda tendencia estaba conformada por
aquellos pensadores que, aunque no eran ateos, criticaban a la religión y a la
Iglesia, así como a las instituciones religiosas; ellos consideraban que ni la
religión, ni la iglesia, ni las instituciones erigidas en nombre de Dios podían
servir de base para generar discordias, persecuciones, divisiones, fanatismos
ni absolutismos, tales como los que durante toda la historia de la cultura
occidental se habían suscitado en nombre de Dios.
2.4. El empirismo.
En la época Ilustrada empieza a abrirse
camino el método empírico, el que tenía como principales antecesores a Galileo,
Newton, Kepler, Bruno. Ellos no solo observaban los fenómenos, sino que además
los reproducían en los laboratorios y después proponían sus teorías de orden
matemático y científico; estas teorías eran después aplicadas a la química, a
la física, a la biología, a la sociología. Etc.
2.5. La revolución francesa.
La revolución francesa cuenta en sus
orígenes más cercanos al pensamiento ilustrado pues éste autoproclamaba la
libertad, la justicia, la fraternidad y el orden como las bases sobre las
cuales se podía instaurar un nuevo orden social más justo.
2.6. El humanismo.
La Ilustración cuenta entre sus
antecedentes más remotos los logros y los alcances a los que llegó el
movimiento humanista; movimiento que centró todos sus esfuerzos intelectuales
en desentrañar la esencia del hombre; en este sentido desde esta época, y este
movimiento, empiezan a perfilarse en el hombre características tales como la
libertad, la fraternidad, la justicia, el libre pensamiento, su capacidad de
autodominio y autocontrol, su superioridad sobre los demás seres naturales. Fue
esta la época en la cual se empieza a tomar cierta distancia de la forma de
pensar medievalista centrada en un teocentrismo muy marcado.
2.7. Medios de difusión.
La Ilustración se valió de muchos medios
para difundir sus ideas; entre estos pueden contarse las sociedades secretas,
las logias masónicas, las academias de libre pensamiento, las sociedades de
pensamiento específico de la época, los salones, la prensa periódica, la
internacionalización de las ediciones, también los mecenas empiezan a tener
cierta solvencia económica y se convierten en profesionales en el arte de las
letras: tutores, maestros, preceptores y profesores.
2.8. La razón, rasgo común para
los Ilustrados.
Aunque entre los Ilustrados existieron
ciertas divisiones y tendencias, sin embargo, todos ellos tenían una fe
ilimitada en la razón. En efecto, todos ellos intentaban ver a la razón como
algo desprovisto de cualquier contenido preestablecido (prejuicio); la veían
como si fuera un instrumento seguro en la búsqueda del saber; desde ella
luchaban contra todo argumento de autoridad, toda estructura política y social
anquilosada, criticaban y rechazaban los milagros, pues estos no tenían su
fundamento en la razón, criticaban y rechazaban los mitos, las leyendas y los
misterios bajo el mismo criterio, según el cual no tenían un fundamento en la
razón.
Los Ilustrados consideraban que la razón
podía instaurar la felicidad en la tierra y mejorar a los hombres, por esto,
para ellos todo futuro sería mejor; ellos estaban convencidos de que el
progreso y de que la humanidad podía mejorar en base al desarrollo del saber,
en este sentido la Ilustración y con ella toda la modernidad fue una época
profundamente optimista. La Ilustración es un movimiento entusiasta que
considera que la razón si es potenciada por la emoción y guiada por la
experiencia puede llevar adelante a la humanidad.
2.9. La razón: madre y maestra.
Los ilustrados creían que la razón era la
madre, la maestra y la jueza en los momentos de descubrir las leyes de la
naturaleza, también la veían de esta manera cuando realizaban análisis e
investigaciones científicas y filosóficas.
La Ilustración fue la época en la que todo
se redujo a la razón y a la experiencia sensible; lo que no pasa por el examen
de estas dos posiciones no se puede aceptar y por lo tanto debe ser rechazado y
tildado de superstición, superchería; la razón durante la Revolución Francesa
fue elevada al rango de diosa, se habló por aquel entonces de la diosa Razón;
esta se asociaba a nociones tales como luz, progreso, emancipación, desarrollo.
La razón asume una posición crítica frente
a la Tradición, siendo ésta, a su vez, tildada de superstición y tenida como un
producto propio de las épocas oscurantistas; por esta razón algunos Ilustrados
se hicieron el propósito de depurar el pasado de todo elemento oscurantista e
irracional que pudiera estar contenido en él.
A partir de la Ilustración empieza todo un
estudio riguroso sobre la historia, generando con ello fenómenos tales como el
historicismo, la historiografía, la historia efectual; estudio que tiene su
fundamento en la razón y en la labor crítica que ésta pudiera ejercer; las
ciencias comienzan a tener un valor y un estatuto epistemológico y científico;
las ciencias sociales empiezan a ser pioneras en el desarrollo de las
sociedades, esto generaría un clima tal que al final del siglo de las Luces se
llevarían a cabo las grandes revoluciones sociales.
2.10. Los Ilustrados y el
cartesianismo.
Los fundamentos racionales sobre los cuales
se apoya la Ilustración fueron dos, primero: la teoría cartesiana que tenía su
fundamento en la duda metódica y a través de esta podía llegar a establecer
ideas claras y evidentes.
2.11. Los Ilustrados y la teoría
newtoniana.
El segundo fundamento teórico sobre el cual
se apoya la Ilustración fue la teoría de la gravedad universal propuesta por
Isaac Newton, la cual tiene su fundamento en el descubrimiento de unas leyes
físicas sencillas que trataban de explicar el funcionamiento del universo
físico; leyes que además se podían aplicar a lo social, lo económico y lo
político.
2.12. Los Ilustrados y la defensa
de sus derechos.
Los Ilustrados defendían una serie de
derechos naturales inviolables, defendían la libertad frente al abuso del poder,
el que era ejercido desde estamentos absolutistas, rechazaban los rasgos
rígidos y eclécticos que eran impuestos por el antiguo régimen. Ellos
criticaban cualquier tipo de intolerancia, rechazaban toda forma de religión
tradicional, criticaban toda concepción de Dios que fuese o presentase a un
Dios castigador o a un Dios que no estuviese fundamentado en una concepción
naturalista de la religión o a un Dios que no fuese una experiencia de amor,
compasión y perdón.
2.13. La Ilustración y el
antropocentrismo.
Ya desde el Renacimiento la fuerza
reflexiva se concentra en torno al tema del hombre y en torno al ser humano. La
Ilustración afianza y reafirma esta idea; ahora, la Ilustración, concentra
todas sus fuerzas en el estudio del hombre como ser racional e intelectivo, el
ser humano en cuanto ser sensitivo y volitivo dando pie con ello a la reflexión
sobre el gusto y el placer. El hombre es visto desde su corporeidad y desde su
materialidad. La reflexión, que se había iniciado en el Renacimiento, desde
Italia en torno al hombre, ahora, durante la Ilustración se empieza a desplazar
hacia Francia; con este giro, la Ilustración se convierte en una época en la
que por consiguiente el tema de la fe se traslada de Dios y se desplaza hacia
el hombre; se empieza a perfilar así una gran confianza en lo que éste puede
alcanzar, lograr y hacer. El progreso, que es un fenómeno propio de esta época,
es un acontecimiento humano, ilimitado e indefinido; en torno al tema del
hombre se presenta la famosa disputa entre los antiguos y los modernos ¿Son los
hombres modernos más desarrollados, evolucionados y progresistas que los
antiguos?
La filosofía se presenta como un fenómeno
optimista en contraposición al papel de esclava que había tenido en la época
medieval ¿La filosofía esclava de la fe o la fe esclava de la filosofía? La
sociedad, al perder el rumbo teocéntrico que la había caracterizado en el
medioevo, inicia así un largo proceso de secularización. La secularización que
tendrá sus rasgos más característicos en el laicismo, en la cultura
antirreligiosa, anticlerical y llegando al extremo del ateísmo.
La Ilustración, sin embargo, a partir de su
gran énfasis en los rasgos propios del ser humano, llega a caer en el otro
extremo, conformándose así lo que se llamó el lado oscuro del siglo de las
luces, y es entonces cuando se tocan los confines del Satanismo, el Nihilismo,
la Masonería, el Ateísmo, el Sensualismo sadomasoquista, el Deísmo y el Agnosticismo.
Considero pertinente comenzar este comentario haciendo alusión a la estructura tan satisfactoria que cuenta este articulo: normalmente estamos acostumbrados a párrafos extensos y un lenguaje sofisticado a la hora de realizar un análisis histórico-filosófico, sin embargo nos encontramos con puntos claves que desglosan los temas a tratar, permitiéndonos enfocar en lo que verdaderamente corresponde y no perder el hilo conductor. Con respecto al lenguaje, y citando a Guillermo de Ockham "Entia non sunt multiplicanda praeter necessitatem" (Los entes no deben multiplicarse sin necesidad), vemos apartados cortos, concretos y que no necesitan dar tantas vueltas, —error que caemos constantemente los filósofos—, para lograr explicar con claridad. El tema es interesante, no suena «desactualizado», permite dilucidar y entrever muchos tópicos y reflexionar en torno a la importancia e influencia que ha tenido la ilustración hasta nuestros días. Sin duda un articulo muy lucido y lúcido que nos lleva de la mano en todo momento para comprender qué fue la ilustración.
ResponderEliminarestimado Juan Pablo agradezco tu aporte al texto, te considero un buen alumno, creo que eres valioso, y me deslumbras por tu manejo del latín. gracias.
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